25 de julio de 2010

Comunicación Política 2.0

Mirgreth Guerrero y Paola Herrera (*)




Cualquier diccionario de informática define a la Web 2.0 como la segunda generación de la Word Wide Web (WWW), que se enfoca en la habilidad de la gente para colaborar y compartir información online.

Gracias al avance tecnológico 2.0 las páginas Web son más dinámicas, organizadas y basadas en aplicaciones donde el usuario es el protagonista.

En esta oportunidad se enfocará la Web 2.0 en el ámbito político, es decir, la comunicación política que se ha generado con dicha evolución, tomando como ejemplo la campaña electoral del Presidente Barack Obama.

La política 2.0 poco a poco ha tenido un aumento notable por acciones desarrolladas en las campañas electorales que se llevan actualmente en el mundo, como por las acciones de comunicación política aplicadas a Internet que se comienzan a implementar en los gobiernos.
Cualquier diccionario de informática define a la Web 2.0 como la segunda generación de la Word Wide Web (WWW), que se enfoca en la habilidad de la gente para colaborar y compartir información online.

Gracias al avance tecnológico 2.0 las páginas Web son más dinámicas, organizadas y basadas en aplicaciones donde el usuario es el protagonista.

En esta oportunidad se enfocará la Web 2.0 en el ámbito político, es decir, la comunicación política que se ha generado con dicha evolución, tomando como ejemplo la campaña electoral del Presidente Barack Obama.

La política 2.0 poco a poco ha tenido un aumento notable por acciones desarrolladas en las campañas electorales que se llevan actualmente en el mundo, como por las acciones de comunicación política aplicadas a Internet que se comienzan a implementar en los gobiernos.

Los políticos podrían utilizar la tecnología para implementar nuevas formas y estrategias de comunicación con el público meta, sin olvidar los métodos tradicionales; esto quiere decir, que deben aprovechar todos los medios para realizar buenas campañas electorales y obtener resultados favorables.

Es importante señalar, que con la segunda generación del Internet, las personas no son receptoras pasivas ya que tienen la posibilidad de involucrarse, participar e influir activamente; por eso los candaditos deberían estar atentos a no cometer errores porque se convertiría en una amenaza para su candidatura.

La diferencia básicamente entre la campaña 2.0 a las tradicionales es el público, debido a que éste es el protagonista y no el candidato, lo cual genera mayor responsabilidad porque no es solo un discurso, o como diría Obama “Esto se trata de ti, no de mí”.

Obama ha creído en la red

La presencia de Obama en la Web desde sus comienzos hasta su llegada a la Presidencia ha demostrada una amplificación de su estilo de comunicación y relación con sus seguidores.

Octavio Islas, Miembro del Sistema Nacional de Investigadores de México considera que “la campaña propagandística realizada por Barack Obama como auténtico en el marketing político. Si Al Gore es reconocido como el ciberpolítico más inteligente en los ambientes comunicativos propios de la Web concebida por Tim Berners-Lee, Barack Obama definitivamente tendrá que ser considerado como el político más emblemático de la Web 2.0”

El equipo encargado de los medios digitales utilizados por Barack Obama estuvo conformado por Chris Hughec (Uno de los fundadores de Facebook), Sam Graham Felsen (Bloguera jefa), entre otros. Según Seo Colombia, empresa especializada en posicionamiento de sitios web, Obama tuvo más de 160,000 seguidores en Twitter, 4.565.738 seguidores en Facebook y 1143892 amigos en myspace, lo que ratifica la importancia que el equipo asesor de de Obama le dio a la web.

A través de la comunicación política 2.0, el Presidente de los Estados Unidos logró comunicarse con personas de diferentes gustos, afinidades y generaciones distintas, pero al principio buscaban captar la atención de los jóvenes que utilizan estas redes.

La campaña utilizó las tecnologías de la información y comunicación (TIC) para convertir a toda la organización en acción, con el fin de integrar a las comunidades, recaudar fondos como sino se tratara de una campaña política sino de la mejoría para la nación.

Tanto fue el éxito que obtuvó la campaña electoral de Obama que las personas se sentían asociados a esta línea electoral. Definitivamente realizó un buen trabajo junto a sus habitantes.

“El periodismo ciudadano bien entendido exige una redacción capaz de conservar en un plano de igualdad con sus usuarios y mantener así el máximo nivel de interactividad posible” según lo señala Luis González Esteban en un trabajo titulado Modelos de periodismo local y estrategias ante la crisis publicado por la Universidad Miguel Hernández de Elche, España.

Palabras muy ciertas, porque actualmente se trabajan temas en la Web 2.0, como es la política comunicacional y un ejemplo fue la campaña electoral de Obama, donde las personas fueron parte de este proceso.


(*) cursantes del 9no. período de Comunicación Social, mención organizacional, en la Universidad Católica Santa Rosa (UCSAR)

Trabajo en Equipo: habilidad necesaria e instrumento útil para todos

Lisett Mota Gómez (*)





Desde pequeños, las personas siempre nos hablaban acerca de trabajar en equipo, como por ejemplo está el caso de hacerlo con nuestros compañeros de escuela para que se nos facilitaran nuestras asignaciones. Con el transcurrir del tiempo, nos damos cuenta que trabajar en equipo puede hacer de nuestras actividades algo más fácil, ya sea en el campo laboral, profesional, estudiantil, o en cualquier otra área, claro está siempre y cuando el trabajar en equipo se cumpla, porque de lo contrario intentar hacerlo con la falta de voluntad de los integrantes del mismo, no arrojará los resultados deseados.

Pero, en si: ¿que significan trabajo y equipo?, por trabajo: comúnmente se entiende como el desempeño de las personas en determinada función, actividad o labor mientras que por equipo: se puede entender que se trata de desarrollar lo antes mencionado bien pudiera ser alguna actividad o cualquier otro tipo de cosa que implique la compañía de más de una persona es decir, que se incluyen varios individuos por un fin en común.

Ahora bien conozcamos a estas dos palabras que fusionadas tienen un solo significado, para Félix Socorro profesional en Ciencias Administrativas en su artículo Trabajo en equipo: una visión diferente: “el Trabajo en equipo es una expresión espontánea, natural, que obedece más a la empatía, conexión emocional y visión compartida de sus integrantes que a elementos de índole formal o administrativos impuestos por agentes exógenos. Aún cuando trabajan por un objetivo común, no existen imposiciones ni compromiso, reina la intradisciplina, identificación y la coestima.

Pero solo si la persona posee la aptitud para el trabajo en equipo es que este fenómeno administrativo, soñado, deseado y hasta forzado por muchos, se hace presente e imprime a los resultados esa energía que requieren para sobresalir y alcanzar lo que se han propuesto, de lo contrario el trabajo se hace, sí, pero con altos costos de frustración, malestar e imposición experimentados en diferentes niveles, según trabajo de Félix Socorro publicado en http://www.gestiopolis.com/organizacion-talento/una-vision-del-trabajo-en-equipo.htm

Entendiendo lo antes planteado, el trabajar en equipo es una herramienta de gran utilidad para cualquier organización o lugar que dependa de la participación del recurso humano dispuesto para emprender las diversas funciones, vale la pena destacar para que nos sirve el trabajo en equipo: para la resolución de problemas, la propuesta de cambios, cooperan en la toma de decisiones, analizan los fracasos para no volverlos a cometer e inclusive, hasta de ellos pueden depender los éxitos o los fracasos de las organizaciones porque estas pueden depender mucho del trabajo que los mismos efectúen.

Es importante hacer mención de lo que se necesita para que el trabajo en equipo sea efectivo, de acuerdo al trabajo compilado por Isabel González para Conindustria y disponible en http://www.coninpyme.org/pdf/LiderazgoyTrabajoenEquipo.pdf:


  • Objetivos comunes y acordados (Claramente definidos y compartidos)
    Tareas definidas y negociadas (Desempeños claros y acodados a conformidad con los miembros)

  • Procedimientos explícitos (Para la solución de problemas, la toma de decisiones el acceso a la información, lo cual garantiza fluidez)

  • Buenas relaciones interpersonales (Clima de respeto y confianza para que se genere sentido de pertenencia)

  • Alto grado de interdependencia (Tareas complementarias, conciencia del esfuerzo para el logro de objetivos comunes, fomento la cooperación y de estructuras horizontales de comunicación)

Indiscutiblemente se hace muy necesario y sobre todo en el campo organizacional, poner en práctica constantemente el trabajo en equipo ya que de esta forma pueden lograrse objetivos de suma importancia.





(*) cursantes del 10mo. período de Comunicación Social, mención organizacional, en la Universidad Católica Santa Rosa (UCSAR)

Los recursos simbólicos y su administración

Christhian Colina y Susana Raván (*)



Entre el conjunto de valores, normas y creencias que conforman el basamento de la interacción de los miembros de una organización, encontramos los elementos simbólicos, que no son más que aquellos elementos capaces de ser contextualizados en la cotidianidad laboral de las personas, imprimiéndole sentido a su jornada. Por ende, tales mecanismos tienen la capacidad de reforzar los valores propios de toda organización y guiar de una forma peculiar la toma de decisiones trascendentales para su futuro.

Tal como lo señala el investigador mexicano Horacio Rodríguez de San Miguel, estos elementos han de repercutir en el plano racional y lógico de los actores de toda organización, especialmente en sus hábitos, costumbres y su motivación hacia el trabajo.

Algunos elementos simbólicos que forman parte de las organizaciones son:

  • La misión, visión, valores, creencias y principios institucionales que reflejan lo que la organización es en el presente y será en un futuro a corto, mediano y largo plazo.
  • Aquellos dispositivos de identificación visual y corporativa, como lo son colores, logotipo, uniformes, iconografía, mobiliario y el resto de los elementos gráficos de toda organización
  • La historia y las celebraciones que realiza la organización, para rememorar fechas de importancia.
  • El slogan, que actúa como el factor de seducción a nuevas audiencias y los incorpora a sus actores de la cotidianidad.

La administración de tales recursos simbólicos la debe llevar una persona que sea capaz de fomentar o dirigir políticas y proyectos comunicacionales a fin de realzar esos parámetros internos y contextualizarlos a la exteriorización de los mensajes a públicos metas. Es importante destacar que deben establecerse las limitaciones y basamentos capaces de dirigir las acciones del desenvolvimiento diario de la organización, pudiendo implementar nuevas técnicas y estrategias que permitan la retroalimentación y evaluación constante de sus actividades.

La administración de estos recursos simbólicos debe ser realizada de forma óptima y eficaz, permitiendo ser aprovechados al máximo y conduciendo a la ejecución de actividades que realcen su connotación dentro las organizaciones que forman parte de la competencia en la oferta de bienes y servicios de determinadas áreas comerciales de la sociedad.

La eficacia de la administración de los recursos simbólicos dependerá del grado de vinculación e interiorización del encargado de dirigirlas, ya que todos estos elementos son capaces de representar lo interno de la organización, así como los actores que participan en su diarismo y no tienen mayor connotación ante los agentes externos.

Básicamente no existen soluciones universales que permitan la más sustentable administración de los elementos de una organización, es por ello que los lineamientos de conducción tanto a nivel gerencial y comunicacional son originados tras evaluar la realidad organizacional, lo que permite el planteamiento de nuevas estrategias que ofrezcan la más sencilla incorporación de nuevos sujetos.




(*) cursantes del 9no. período de Comunicación Social, mención organizacional, en la Universidad Católica Santa Rosa (UCSAR)

5 de julio de 2010

Responsabilidad social empresarial y su valor para las Organizaciones



Allan Arguinzones y Francis Liendo (*)


Partiendo del concepto de organización concebido por Stephen Robbins en el año 1999, como una “unidad social coordinada conscientemente, compuesta por dos o más personas, que funciona con una base de relativa continuidad para lograr una meta común o una serie de metas”, podemos entender con mayor claridad el fundamento esencial de las empresas u organizaciones y su compromiso con el sector social, ya sea interno o externo.

A lo largo de la historia, se evidencia como grandes empresas han tomado muy en serio ese compromiso, e incluso se han consolidado como organizaciones cuyo principal objetivo es el de responder directamente a las necesidades de la localidad. Empresas como Polar, Banesco y Fundación Cisneros son algunas de las compañías que han manifestado su soporte, ofreciendo soluciones a los problemas más relevantes del contexto social de los cuales forman parte.

Ahora bien, este actuar y este accionar de las organizaciones dentro de la colectividad, es debido a que empresarios y gerentes han tomado conciencia y se han sensibilizado ante la verdadera realidad que encierra la sociedad de hoy y es así como nace en un principio la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) que, según la Unión Europea, en julio de 2001, definió en el Libro Verde. Fomentar un marco europeo para la responsabilidad social de las empresas como “la integración voluntaria, por parte de las empresas, de las preocupaciones sociales y medioambientales en sus operaciones comerciales y sus relaciones con sus interlocutores”.

Es por esto que las empresas ya no sólo tienen una función económica sino también social. Desempeñar un papel sumamente importante entre las personas, generando además de empleos, un desarrollo en la comunidad donde están insertos, es también una responsabilidad subyugada en su naturaleza. Sin embargo, hay otros factores que, en conjunto con la RSE, mejoran los servicios que promocionan, incrementando favorablemente la imagen de dicho negocio. La misión, visión y los valores de la organización son determinantes dentro de este proceso de inclusión en los conflictos que viven las audiencias y que la misma empresa puede dar solución.

Hoy en día, el éxito económico no depende únicamente de una estrategia de aumento al máximo de los beneficios, sino de tener en cuenta el fomento de su responsabilidad social y la protección del medio ambiente, así como los intereses de los consumidores.

Actualmente la Responsabilidad Social Empresarial se ha convertido en una herramienta de negocios, puesto que le otorga a las organizaciones la lealtad y el reconocimiento por parte de los consumidores. Todo esto generando un nuevo enfoque en la manera de hacer negocios, en el que el fundamento de la empresa es convertirse en un motor de desarrollo económico, de manera ética y socialmente responsable, sin priorizar el beneficio o la utilidad económica de la inversión sobre aspectos reprochables desde un punto de vista social.

Cada vez son más las empresas que se involucran en iniciativas sociales, con la idea de que el éxito del negocio depende tanto de contar con un buen producto o servicio, como de preocuparse por la comunidad a la que se dirigen.



(*) cursantes del 9no. período de Comunicación Social, mención organizacional, en la Universidad Católica Santa Rosa (UCSAR)

Comunicación Corporativa 2.0: La nueva forma de hacer comunicación organizacional


Josemar Noguera y Estefany Carreño (*)


A lo largo de la historia de la humanidad, los seres humanos hemos tenido la necesidad de intercambiar información para expresar nuestras emociones, sentimientos y carencias.

Actualmente, gracias al avance vertiginoso de la tecnología, existen diversas maneras de transmitir información. Nos comunicamos a través de celulares, mensajería de texto instantánea o multimedia, correos electrónicos, videollamadas, redes sociales, entre otras aplicaciones, que se ubican dentro de las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC).

Ahora bien, cuando hablamos de Comunicación Corporativa nos referimos a la herramienta utilizada por las organizaciones para transmitir información, en cuanto a su visión y misión, a las audiencias claves para proyectar identidad y generar la imagen deseada. Así como las personas hemos adoptado nuevas maneras de comunicarnos, las empresas deben utilizar las herramientas tecnológicas dentro de su estrategia comunicacional porque tienen un nuevo reto que enfrentar en el intento por lograr un buen posicionamiento dentro de un mundo donde los intercambios económicos, sociales y culturales son globalizados y, por tanto, la competencia es mucho mayor.

La web 2.0 permite que las empresas logren tener presencia en el ámbito global y, ha producido una evolución en cuanto a la definición de comunicación organizacional, al punto tal de que en el presente hablamos de Comunicación Corporativa 2.0. Según el texto titulado “El poder de la conversación entre instituciones y sus públicos en el universo digital”, publicado por Juan Pedro Molina Cañabate, Director de la I Jornada de Comunicación Corporativa 2.0 de la Universidad Carlos III de Madrid, disponible en el portal web http://www.uc3m.es/ “El nuevo modelo no se basa en la mera emisión de información, sino (tal como propugna el Manifiesto Cluetrain) en la conversación con los públicos, en el intercambio de los roles emisor-receptor o en la desaparición de barreras y jerarquías”.

Con la Comunicación Corporativa 2.0 es posible que las organizaciones conozcan qué piensan las personas sobre la institución para saber si están generando la imagen deseada y qué aspectos deben mejorar para cumplir con las necesidades de sus audiencias externas. Sin embargo, Molina Cañabate advierte que “la Comunicación Corporativa ha cambiado tanto que el emisor inicial ha de saber que una vez haya lanzado su mensaje perderá el control sobre el mismo”. En este punto afirma que las organizaciones no deben tener miedo sino que por el contrario deben trabajar más su estrategia comunicacional.

Aprenda a utilizar las redes sociales
Las redes sociales como Twitter y Facebook, además de ser gratuitas ofrecen una serie de aplicaciones que las corporaciones pueden usar para tener contacto con sus audiencias, sin embargo hay que saber cómo utilizar estos recursos para aprovecharlos al máximo. En un articulo publicado por Miguel Antezana (Director del grupo DIRCOM en Venezuela), titulado “Comunicaciòn Corporativa 2.0”, explica que los contenidos son un aspecto importante a tomar en cuenta: “Si las utilizas (las redes sociales) pero no se tiene nada que decir, es como una persona parada en medio del espacio de una animada reunión y no dice absolutamente nada, no habla con nadie, ni interactúa con persona alguna. Si su papel va a ser ese, mejor no vaya a la reunión”.

Antezana menciona además, que es importante tener claro que la meta es realizar un trabajo profesional con el apoyo de una plataforma tecnológica y que para que realmente exista un proceso comunicacional debe producirse la retroalimentación. “La comunicación es un proceso de doble vía, es un proceso en el que siempre se espera la respuesta, el feedback. Para que una conversación sea considerada como tal, debe haber coparticipación y constancia.”

Hay que tener presente que la web 2.0 toma a las audiencias externas como parte de un proceso de integración donde se quieren vencer las barreras entre cliente y organización, para hacer una comunicación horizontal donde todos podamos participar y donde el público sea un factor clave en el logro de los objetivos de las corporaciones.



(*) cursantes del 9no. período de Comunicación Social, mención organizacional, en la Universidad Católica Santa Rosa (UCSAR)